Me he decidido por un baúl verde, del que tengo unas fotos decentes, que no buenas.
Este fue también una de mis primeras piezas, la segunda si mal no recuerdo.
Tuve la suerte de compralo medianamente entero, por lo que el habitual proceso de restauración previo fue un visto y no visto.
La idea original era pintarlo verde y negro; evidentemente empecé con el verde, y al terminar me gustó tanto, que lo dejé así; el negro le hubiera dado un toque quizá demasiado agresivo y pesado.
De esta manera se ve muy luminoso y encaja en muchos más ambientes.
Casi todo el mundo que lo ve me pregunta si está hecho con plantilla, cosa que me sorprende ya que yo siempre veo algún fallo en los bordes (autocrítica supongo) y la verdad es que no soy capaz de hacer nada con plantilla (a día de hoy no he sido capaz) y mi idea es no repetir diseños así que... ¿plantillas? ¿para qué? Mi madre dice que soy demasiado perfeccionista y lo cierto es que si no fuera por ella, que me convence para dejarlo, seguramente todavía estaría corrigiendo "detallitos".
Lo hice a mano alzada como todo lo que hago, aunque si es cierto que para las línea rectas me ayudo de cinta de enmascarar, pero siempre las acabo repasando a mano, porque al quitarla no sé que problema tiene conmigo la pintura (la muy traicionera!) que se cuela por debajo y nunca me queda perfecta.
Suerte que en este caso mucha línea recta no hay.... :)
